El tenis es así. Un partido disputado en la pista número 18 del torneo All England Club Lawn Tennis Club de primera ronda entre John Isner y Nicolás Mahut apenas tenía relevancia en el torneo, y mucho menos mundial.
Unos poquitos espectadores disfrutaban del partido en la grada mientras en otras pistas jugaban tenistas de mayor entidad, como Rafael Nadal, Andy Murray, Robin Soderling, etc.
Pasaban los minutos y nada parecía cambiar en Wimbledon 2010: Nadal ganaba fácil en su debut, Soderling barría al rival de Londres, y Murray lo estaba haciendo realmente bien. Todo esto sucedía el martes 22 de junio del 2010.
Casi todos los partidos finalizaron, excepto dos: el partido de Thomas De Bakker, y el partido de Isner. Ambos partidos se tuvieron que suspender por falta de luz, ambos partidos sin comenzar el quinto set. El marcador del partido entre N.Mahut y J.Isner estaba en 4-6, 6-3, 7-6 (9-7) y 6-7 (3-7). Antes, toda la atención estaba en el partido de Maria Sharapova y en la derrota de Juan Carlos Ferrero frente a Malisse.
El miércoles 23 de junio, la atracción del día era ver a Roger Federer contra Bozoljac, un desconocido, por lo menos para mí. Roddick había ganado a Llodrá, Venus Williams también había Ganado, y Djokovic lo estaba haciendo fácil frente a Dent en la central. Hewitt estaba derrotando a Korolev en la pista 1, y yo estaba esperando a que comenzase el partido de Federer tras el encuentro de Lleyton.
Antes de eso eché un vistazo a todos los partidos en juego, y un sorprendente 28-28 ponía en el partido de Mahut e Isner, reanudado en el segundo turno de la pista número 18 de Wimbledon 2010.
Por fin comenzó el partido del número dos del mundo, no sin sobresaltos, ya que el suizo cedió la segunda manga y me puse nervioso. Como en España no retransmiten Wimbledon en televisión, tengo que ver los partidos por internet, y puse en la pantalla los dos partidos, a la izquierda el de Federer, y a la derecha el partido entre Isner y Mahut. Y con 39-39 en el marcador me centré, todo hay que decirlo, en el partido que había roto el récord de juegos, ya que Roger había vencido el tercer set, y se encaminaba a cerrar el partido en el cuarto.
Lo estábamos comentando en el facebook, y en el periódico “Marca” pusieron una noticia del partido de Isner y Mahut. Casi todo el planeta se empezó a percatar de lo que estaba sucediendo en la pista 18 de Wimbledon, entre John Isner, y Nicolás Mahut (un desconocido para la mayoría). Yo sinceramente lo había visto jugar sólo en Queens (torneo de hierba de Londres). Mahut siempre juega allí, y en Eurosport lo suelen echar, y en el 2007 ganó a Nadal en dos sets. Recuerdo que aquel partido lo vi desde el principio, y Mahut me parecía un chico muy joven. Estuvo muy sólido y ganó a Nadal sorprendentemente, y por eso me acuerdo de aquel partido. Lo vi otra vez en Queens, pero tampoco he tenido muchas noticias de él. Decir que es un buen sacador, tiene un repertorio bastante bonito de golpes y amplio, y si en algo es especialista, es en hieba.
Enseguida pinché en las estadísticas, e Isner llevaba 50 aces. Pensé, puf, ha igualado los aces de Federer de la final de Wimbledon 2009 frente a Roddick.
El partido ya estaba repleto de fotógrafos a pie de pista que habían ido llegando de las pistas principales. Y qué decir de las gradas… estaban a rebosar, la gente se situaba donde podía de pie para ver el partido. La gente iba y venía viendo los partidos en todas las pistas, y gracias a los videomarcadores que hay en los exteriores de las mismas, todo el mundo se percataba del partido de la pista 18.
Terminó el partido de Federer en 4 sets, y Mahut e Isner iban 44-44!!!. Yo ya no sabía dónde mirar, si los aces, si los ganadores, si la duración del partido, si el resultado… Estaban batiendo todos los récords que se pueda imaginar, aunque el récord de aces de Ivo Karlovic seguía en pie. Isner estaba muy cerca, y le llevaba 18 aces de ventaja a Mahut.
Aparecían en un rincón de la pista, lógicamente de pie, Tim Henman y John McEnroe, vestidos de gala. Mohamed Lahyani se bajaba de la silla en un descanso de cambio de pista, pensé que había suspendido el partido por falta de luz o algo, pero de repente se dio un pequeño paseo para estirar las piernas y mover sus brazos, para evitar el llamado síndrome del turista. Se subió de nuevo a la silla, y pronunció el clásico “time”. El público ovacionaba a los jugadores cada vez que había un descanso, aquello no era el sonido de las vuvuzelas, pero no quedaba lejos, jeje.
Desde que puse el enlace para ver el partido, me dio la impresión de que Isner estaba agotado, y continuamente se agachaba y miraba al suelo lamentándose de errores o de oportunidades desaprovechadas.
En cambio Mahut parecía mucho más entero, con un amplio repertorio de golpes (revés cruzado cortado, una derecha paralela definitiva, y un revés paralelo brutal, el cuál cada vez que lo lanzaba metía un winner increíble).
Pero nada más lejos de la realidad, Mahut necesitaba asistencia del fisioterapeuta de la ATP debido a unos calambres, pero apenas le provocaron efecto en su juego.
Los saques se imponían, y alguna vez se produjo un 15-30 o un 30-30 que volvía locos a los aficionados que podían ver el partido en directo (no muchos, porque apenas hay gradas). Probablemente había más aficionados levantados que de pie. Cuando se llegaba al 40-40, los ánimos eran grandes.
Ambos tenistas no tuvieron la posibilidad de pedir el ojo de halcón ya que en dicha pista no existe dicho instrumento. ¿Qué hubiera pasado si el partido hubiese sido en la pista central y hubieran agotado pronto las 3 opciones de pedir el ojo de halcón en el quinto set?. Quizá deberían replantearse dar más opciones a partir del 20-20 o cosa así.
Cualquiera que viese el quinto set asegurará que el partido no estaba pactado ni mucho menos. Era increíble la cantidad de ganadores a las líneas, y de tiros definitivos sin temblar el brazo con 30-30. Realmente no había miedo a perder, y por eso el sacador se sentía confiado y colocaba ganadores en los momentos más comprometidos. Si hubiese miedo a perder, probablemente el partido habría finalizado muy pronto.
Con el 50-50 yo ya no sabía dónde meterme, el marcador electrónico de la pista 18 se apagaba, en la página oficial de Wimbledon ponía 2 sets iguales y 1-0 en el quinto set al llegar a dicho 50 iguales, incluso los minutos del partido se habían parado en un número fijo, aunque el resto de estadísticas sí se actualizaban. Qué decir del récord de Karlovic (78 aces), Isner lo había pulverizado, y Mahut iba camino de ello. El francés se acercaba a Isner en los aces, de los 18 de diferencia que llegué a ver, tan sólo eran 8.
Mahut falló una volea fácil y del enfado le pegó un raquetazo a la red.
Mohamed Lahyani tuvo que bajar de su silla a medir la altura y colocar la red en su sitio. El francés se disculpó por la acción.
Mahut no pudo pedir el ojo de halcón debido a que ya los había gastado, y protestó una bola:
Los jueces de línea se movían y estiraban en los descansos del cansancio para relajar sus músculos, Layhani ya no hacía otra cosa que reírse y repetir el marcador, algo que jamás nadie en la historia había hecho, cantar en una pista de tenis un 50-50, o un 55-55.
Supongo que se debieron de pedir varios botes de pelotas nuevos, porque los que hubiese se habrían acabado. No vi ninguna imagen, pero no me estrañaría que las raquetas fuesen enviadas a los entrenadores para que las encordasen o les cambiasen la tensión de las cuerdas. Isner se miraba las manos, probablemente observando alguna ampolla. Layhani tenía el cuello destrozado.
Mahut se tiró dos veces en plancha para llegar a bolas imposibles, tirando su raqueta al aire para ver si le daba a la pelota (aunque pasase la red, no es punto porque la raqueta tiene que estar en la mano del tenista). Isner se reía de las caídas de Mahut en plancha, no sabía de donde le salían las fuerzas al galo.
Mahut recibiendo asistencia médica (masajes):
Dos bolas de break salvó Isner, sólo había concedido una bola de break en todo el partido a Mahut, algo increíble. A la postre, sería Isner quién tendría bola de partido con 59-58 a su favor. Pero Mahut se repuso con un ace e igualó a 59-59.
En ese momento, se dirigió a Lahyani y pidió el aplazamiento del partido, en cierta parte por la falta de luz, pero también por sus calambres. Isner no quería parar, obviamente, pero tras unos segundos de espera, la organización decidió suspender el partido. Estaban casi en las 10 horas de duración, casi con 100 aces cada uno, con 59-59 en el quinto set, de locos, y el partido seguiría el día siguiente, en la misma pista.
La prensa internacional sacaba imágenes y la noticia circulaba en todo el mundo. Los jugadores fueron entrevistados a pie de pista como héroes, realmente lo eran. El público quería más y gritaban: “We want more”.
El jueves 24 de junio del 2010 se acabó por fin el partido en la pista 18 de Wimbledon 2010. Todo el mundo estaba pendiente de dicho partido, correspondiente todavia a la primera ronda de esta edición. Qué decir... todo siguió igual, aumentando los aces, los ganadores, la duración del partido, del set, la emoción seguía (aunque lo de ayer fue más emotivo) y del 59-59 inicial se llegó al 70-68 final, con dos bolas de partido para Isner. La primera la salvó Mahut con un gran servicio, pero en el segundo punto se equivocó, se quedó a media subida a la red, e Isner le colocó un passing paralelo de revés a dos manos que significó la victoria más curiosa de toda la historia del tenis. La ovación no se hizo esperar.
Isner jugará contra el holandés Thiemo De Bakker, que venció al colombiano Santiago Giraldo por 6-7, 6-4, 6-3, 5-7, 16-14.
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